Foto: Foodie Woman

Los cannolis son un postre típico italiano. Nacieron en monasterios de la ciudad de Sicilia, y las monjas fueron las encargadas de conservar las recetas y hacerlos.

Hoy son el producto de pastelería estrella que se encontrarán en todos lados.

Se dice que durante el carnaval en el siglo XI (época de desenfreno para algunos), los hombres les daban cannoli a las mujeres para insinuarse.

Los expertos en pastelería italiana aseguran que es muy importante usar productos de muy buena calidad.

Es por esto que muchos pasteleros italiano usan productos de granjas de la zona y productores pequeños.

Hacer cannolis tiene su tiempo de elaboración, pero vale el esfuerzo.

Hay un detalle muy importante si queremos que nos queden bien; se deben rellenar en el momento de servir así no se ablanda la masa.

Receta:

Ingredientes:

Masa:

20 gramos de azúcar

20 gramos de grasa de cerdo

300 gramos de harina

5 claras

sal a gusto

1 cda de vino marsala

Relleno:

125 gramos de azúcar impalpable

250 gramos de ricota

Aceite para freír en cantidad necesaria.

Opcional:

Chocolate picado

Pistachos

Azúcar impalpable para espolvorear

Naranja abrillantada

Procediemiento:

Para la masa:

Derretir la grasa. En un bol colocar la harina y formar un volcàn o corona, agregar la sal.

En otro recipiente disolver el azúcar con el marsala, incorporarlo con la harina, añadimos la grasa de cerdo y las claras.

Empezar a mezclar los ingredientes del centro hacia afuera, amasar sobre la mesada hasta obtener una masa lisa, formar un bollo y dejar reposar cubierta con film durante 30 minutos en la heladera.

Para el relleno:

Tamizar la ricota y colocarla en un bol, incorporar azúcar impalpable y batir hasta obtener una textura cremosa.

Corte el chocolate en pequeños trocitos y agrégarlo a la ricota, mezclar y colocar el relleno dentro de una manga.

En una cacerola colocar el aceite para fritar y llevar al fuego.

Estirar la masa con la palote o con máquina de pasta hasta obtener una lámina bien fina.

Cortarla en discos de 8cm de diámetro y pasarlos una vez mas por la máquina de pasta dando forma ovalada.

Tomar un óvalo de masa y enróllarlo en el tubo de metal, luego presionar suavemente el cierre de la masa sobre la mesada para que se pegue.

Proceder del mismo modo con el resto de la masa.

Una vez caliente el aceite, freír los cannolis hasta dorarlos levemente, escurrir sobre papel absorbente.

Quitar el tubo de la masa cuidando que no se rompa, y una vez fría la masa rellenarla con la  preparación de ricota.

Decorar los extremos con chocolate picado o pistachos y espolvorearlos con azúcar impalpable.

Servir en una fuente o bandeja.